Cuando un haz de luz blanca pasa a través de un prisma las distintas longitudes de onda que la componen son refractadas de forma diferente, dispersando la luz en una banda de colores que corresponden a todas las longitudes de onda que la componen. 

La radiación de mayor frecuencia (violeta) se refracta más que la radiación de menor frecuencia (rojo), dando lugar a la separación de la luz en las diferentes radiaciones que la componen, llamado espectro de la luz visible.